#MoraBancExperts

Panorama económico: Perspectivas mercados 2025

MoraBanc 2025-01-21

Venimos de cerrar un año 2024 que ha sido muy positivo para los mercados financieros globales, impulsado por una combinación de factores clave: el inicio del ciclo de bajadas de tipos de interés en EE. UU. y en Europa, la fortaleza económica norteamericana, unos resultados empresariales sólidos; y un notable entusiasmo inversor para el sector tecnológico y para la inteligencia artificial. A este contexto se sumaron las elecciones estadounidenses, con la victoria republicana de D. Trump, que añadió impulso a las bolsas, a la vez que favoreció la apreciación del dólar frente a otras divisas como el euro. Así, el S&P 500 destacó con un rendimiento del 23,31%, superando ampliamente el 8,28% del Euro Stoxx 50, reflejando un diferencial histórico entre las bolsas europeas y estadounidenses.

Por su parte, la renta fija también vivió un año favorable, marcada por los cambios constantes en las expectativas de inflación y política monetaria. Los bonos corporativos high-yield lideraron los rendimientos gracias al aumento de la demanda por crédito con riesgo y el estrechamiento de los diferenciales de crédito. En deuda gubernamental, el bono estadounidense a 10 años cerró el año con un rendimiento del 4,57%, mientras que el bono alemán a 2 años finalizó en el 2,077% de rentabilidad.

De cara a 2025, pese a las múltiples incertidumbres, se espera que el crecimiento global se mantenga resiliente, con un liderazgo claro de Estados Unidos. En cambio, Europa y China mostrarán signos de relativa debilidad.

Inflación y política monetaria

  • La inflación global seguirá desacelerándose, especialmente en Europa y en sectores como servicios básicos y componentes subyacentes.
  • Este entorno permitirá a los bancos centrales continuar con políticas expansivas, con recortes adicionales de tipos en Europa, Reino Unido, Canadá y otras economías desarrolladas. En cambio, en Estados Unidos, las futuras políticas de la nueva administración de D. Trump podrían generar más inflación (aranceles, políticas migratorias agresivas) y, por tanto, retrasar el ciclo de bajada de tipos por parte de la Reserva Federal.

Riesgos

  • Los conflictos en Oriente Próximo, Ucrania y Rusia, y las tensiones comerciales EE. UU.-China son factores clave que podrían alterar el panorama económico.
  • La administración Trump introduce incertidumbre adicional, especialmente con políticas arancelarias y migratorias agresivas.

Perspectivas regionales

Estados Unidos

  • Debería ser el principal motor del crecimiento global, en el que esperamos una actividad por encima de la tendencia y una economía en una fase avanzada del ciclo, pero no final.
  • Las políticas fiscales y la reducción de la regulación con la nueva administración de Trump ofrecen apoyo al mercado.
  • Riesgos: Los cambios en política comercial y migratoria podrían aumentar los costes empresariales y limitar la oferta laboral, con efectos moderadores sobre el crecimiento y la presión sobre la inflación.

Europa

  • Se espera un crecimiento por debajo de la tendencia por un período prolongado, penalizado por la baja productividad, la alta dependencia del comercio exterior y los riesgos derivados de posibles aranceles de EE. UU.
  • Europa también podría ser, junto a China, la principal víctima de cualquier arancel o política introducida por la nueva administración en EE. UU.
  • La proximidad con conflictos como Ucrania-Rusia y los desafíos de la Unión Monetaria acentúan la debilidad estructural. Esto junto a la inestabilidad política en Alemania y Francia.

China y emergentes

  • Los desafíos estructurales en China persisten: la demografía, los elevados niveles de deuda en el sector inmobiliario y otras áreas, así como la desconfianza que se ha instaurado en los últimos cinco años, tanto en el consumidor como en las empresas.
  • A pesar de este entorno estructuralmente desfavorecido, se esperan estímulos por parte del gobierno a niveles fiscales, monetarios y reguladores importantes para contrarrestar la debilidad interna y ofrecer un impulso cíclico.

Activos financieros y estrategias de inversión

Renta variable

  • Un escenario de crecimiento resiliente e inflación moderada con políticas monetarias expansivas es, en principio, favorable para los activos de riesgo. Junto a los factores macroeconómicos, las acciones tienen un gran apoyo gracias al crecimiento saludable de los beneficios.
  • Las valoraciones globales son elevadas, pero esto se debe principalmente al impacto de las grandes tecnológicas (“las 7 magníficas”), que muestran una fuerte concentración de rendimientos. Cuando se excluyen estas grandes empresas, el mercado se encuentra en línea con las valoraciones históricas y ofrece oportunidades interesantes.
  • Iniciamos el año con una exposición neutral en el activo de renta variable, enfocado especialmente en sectores cíclicos y beneficiados de la desregulación en EE. UU.

Sectorial y regional

  • En EE. UU., preferencia por sectores como el financiero, industriales, consumo discrecional y pequeñas y medianas empresas que se benefician de la desregulación y del onshoring.
  • En Europa, aunque el crecimiento se prevé débil, podrían encontrarse oportunidades en mercados periféricos (sur de Europa).
  • Monitorización de mercados emergentes como China con valoraciones atractivas para entrar, si el gobierno apoya a la economía con una batería de ayudas significativas.

Renta fija

Tipos de interés

  • Se espera que los tipos de interés de EE. UU. se mantengan volátiles a corto plazo, impulsados por una Reserva Federal altamente dependiente de los datos y por una incertidumbre adicional derivada de las decisiones de política de la nueva administración de Trump. Esto, en combinación con los recortes fiscales y las políticas de inmigración, hará que las perspectivas sean más complejas.
  • En Europa nos preocupan las políticas comerciales de EE. UU. de la próxima administración, que añaden riesgos a la baja para la economía de la eurozona. Cualquier debilitamiento significativo del crecimiento y del mercado laboral podría incluso conducir a una inflación por debajo del objetivo. Los precios de mercado sugieren una tasa terminal del 2% para el BCE en este ciclo, manteniendo el rendimiento del Bund a 10 años anclado en torno a los niveles actuales. A pesar del aumento de los riesgos de cola económicos, mantenemos una visión constructiva a medio plazo en el activo.

Crédito

  • Los diferenciales del crédito con grado de inversión (EUR IG) han caído por debajo de la media histórica a largo plazo, aunque en Europa no están tan ajustados como en EE. UU.
  • En crédito será un año enfocado en el "carry".
  • Los diferenciales del crédito de alto rendimiento (HY) son ajustados y no descuentan escenarios menos favorables.
  • En cuanto a la duración, teniendo en cuenta la posible volatilidad, preferimos estar en el rango 3-5 años.

Conclusión

El 2025, se anticipa como un año de moderación en el crecimiento global y de ajuste de las valoraciones en activos de riesgo. La flexibilidad y una visión neutral con opciones tácticas en mercados menos tradicionales serán clave para aprovechar oportunidades en un entorno de crecimiento desigual e incertidumbre.