Eres el jefe. No mandes, convence.
La experiencia de Ibon Navarro incluye trabajar al lado de todo tipo de entrenadores. Ha visto maneras de liderar amables, neutras y dictatoriales.
Define su estilo como “democracia dirigida” con la colaboración de su equipo técnico. “Pensamos y analizamos los tres entrenadores y buscamos una manera de dirigir que sea efectiva y que sea cómoda para el equipo. Me gusta hablar con los jugadores, saber lo que piensan. Hay cosas no negociables que quedan claras desde un inicio, y otras que se pueden hablar. Es importante captar lo que te dicen tus jugadores, algunos te lo verbalizan, otros lo expresan con la cara, depende, pero ellos son los importantes, son los que juegan”.
Admite que, en la pista, grita. Sale el carácter, pero no se considera un “sargento”. “Al final lo importante es ser tu mismo. Si eres abierto, no quieras ser un dictador, y si eres una persona cerrada y estricta, pues así haz de actuar. Si cambias tu manera de ser al final te vas a traicionar a ti mismo, hay que ser natural y coherente.”